No comparemos a los niños, cada vida es un milagro divino.
Colombia es un país multicultural y multiracial y se vive también mucho racismo, es un racismo que pasa desapercibido; a los niños por ejemplo, se les discrimina y se les compara de forma inconsciente y sin tener la intensión se forman raíces emocionales que luego pueden bloquear aspectos importantes en sus vidas!!
Soy parte de una familia de 7 hermanos en la cual 3 son rubios y de ojos claros y 4 son trigueños, pero a los ojos de la mayoría de las personas, la belleza digna de elogiar es la del niño rubio de ojos claros y, de forma inconsciente, se elogiaba mucho a mis hermanos rubios y nada o muy poco a los que no lo somos.
Dos de mis hermanos (trigueño y rubio) "sufrieron" más esta comparación, eran contemporáneos y constantemente, al presentarse juntos, la gente se abalanzaba en elogios para el niño rubio y al otro o a los otros, se les ignoraba.
Hoy día mi hermano trigueño vive en Inglaterra, odia asolearse y su piel es trigueña, pero se ve bastante blanco y bueno...ya es un "Lord" jajaja. Por otra parte, mi hermano "el Rubio", se cree el hombre más guapo del mundo y, no es malo sentirse así, el tema es que no ha podido tener una relación estable en su vida de pareja, a parte de un comportamiento en ocasiones muy narcisista y aunque suene gracioso, no lo es! ...a lo que voy, es que se ven afectadas ambas personas de forma negativa, porque los niños perciben claramente las comparaciones y la discriminación y eso no le favorece ni al elogiado ni al discriminado!
los invito a pensar en esto y a estar más presentes cuando vayan a elogiar a un niño, háganlo, pero sin discriminar a otro o ignorarlo.
Todos los seres humanos son bellos y cada uno es un milagro enorme!!
Abrazo de ️corazón.
Gracias Camila por compartir esta reflexión tan valiosa y oportuna en estos momentos de tanta agitación por temas raciales. "Las comparaciones son odiosas", ya hemos escuchado en diferentes ocasiones. Aspiro a que podamos escuchar con el corazón ese llamado y apreciar este recordatorio que nos extiendes a favor de nuestros pequeños. Abrazo poderoso.